¡El pueblo se levanta!
Grita, protesta y reclama
sus derechos.
La angustia y la desesperación
se contemplan en sus caras.
Las casas vacías
y las personas en la calle,
las miradas pérdidas
en otros lugares.
El hambre, la pobreza,
el agobio, la desesperación
se convirtieron
en nuestros mejores aliados.
Gente sin trabajo, sin casas,
sin vida, y todo por una razón...
La razón del abuso,
el acoso, la manipulación,
la desconfianza y
siempre la corrupción.
El poder se hizo
para ayudar, colaborar
y afrontar los problemas...
no para ahogar al pueblo
y dejarlos sin aliento,
no para abusar de ellos
y dejarlos de lado con la pena.
El auténtico poder
reside en el pueblo,
y no en los sueldos
de esos carroñeros...
26/7/12
Suscribirse a:
Entradas (Atom)